Si son muchas las alusiones a conceptos científicos en la longeva serie de Los Simpson, son muchas más las que aparecen en Futurama. Esto no es algo que deba sorprender, ya que, por un lado, ambas series fueron creadas por Matt Groening y David X. Cohen, y, por otro, Futurama está ambientada en el futuro y es, por tanto, una serie de ciencia-ficción.
De hecho, en Futurama la ciencia es una parte importante del andamiaje tanto del argumento como de la ambientación, y se presenta en muchos casos a un nivel que normalmente se escapa a los no especialistas en la disciplina científica correspondiente. Y ello fue posible gracias a que en el equipo creativo de la serie había varios licenciados en ciencias, que supieron sortear hábilmente el mandato que les había dado Groening para que «la ciencia nunca superara la comedia». Como consecuencia de ello, la serie resulta doblemente divertida para todo aquel que atrape todas esas referencias científicas, más o menos escondidas.
Son innumerables esas referencias y en internet hay muchos artículos que las explican. Y de entre todas las disciplinas científicas que aparecen en la serie, quizás merecen una mención especial las correspondientes a las matemáticas, tanto a las puras o académicas como a las aplicadas en otros campos, principalmente la informática. Y es que uno de los guionistas era Ken Keeler, doctor en Matemáticas por la Universidad de Harvard, además de ingeniero eléctrico.
Empezando por las segundas, las relativas a la informática, son numerosas las referencias a los albores de la informática moderna, es decir, a los primeros ordenadores personales: la aparición del número del microprocesador de los primeros Apple en la década de los 70, o juegos de palabras con ordenadores famosos de la década siguiente, como los Sinclair o el Commodore 64. Muchas son también las referencias a lenguajes de programación, como el ochentero Basic (del que llegué a aprender un poco) de los modelos mencionados, o los códigos binario, ASCII, Fortran, etc.
El otro tipo de referencias matemáticas son más difíciles de atrapar para los no iniciados. El 1729, llamado «Número de Hardy-Ramanujan» por ser estos dos matemáticos quienes se dieron cuenta de que es el número más pequeño expresable como la suma de dos cubos de dos maneras diferentes, aparece muchas veces, empezando por ser el número de unidad de Bender; en otro episodio aparece el 87539319, que es el menor número entero que puede ser representado de tres maneras diferentes como la suma de dos cubos positivos. Y, como en Los Simpson, también se hace referencia a las clases de complejidad P y NP.
Pero, sin duda, lo más curioso es que el ya citado Keeler llegó a desarrollar en uno de los capítulos un teorema basado en la teoría de grupos, que ha pasado a ser conocido como el Teorema de Futurama, algo que parece excesivo a su autor, que lo considera una simple demostración matemática, pero que, por otro lado, matemáticos prestigiosos lo llaman Teorema de Keeler.
Referencia
- Futurama y las matemáticas Jot Down.
- Wikipedia.